Usamos cookies en nuestro sitio web para brindarte la experiencia más relevante recordando tus preferencias y visitas repetidas. Haz clic en "Aceptar todas las cookies" para disfrutar de esta web con todas las cookies, configura tus preferencias antes de aceptarlas, o utiliza el botón "Rechazar todas las cookies" para continuar sin aceptar.

Gestión de Cookies
Zona Privada Asociados   |   Boletines Compliance
 
FORMULARIO DE CONTACTO
Deseo suscribirme al Newsletter de la WCA
 

16/07/2018

El «Lopetegui» de Hacienda: se va al sector privado mientras monta la subida de impuestos (España)

El hombre que diseña estos días, por orden del Gobierno, los nuevos impuestos de España sabe ya que trabajará pronto para clientes que querrán reducir en lo posible precisamente la nueva factura fiscal. Si la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, fuera como el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, habría fulminado ya a Alberto García Valera como director general de Tributos del Ministerio.

Igual que Julen Lopetegui sabía ya para quién trabajaría después mientras ejercía un cargo de alto interés general, García Valera conoce que, a la vuelta del verano y tras el diseño de los nuevos impuestos, será uno de los socios directores de EY.

La antigua Ernst&Young es una de las principales consultoras y auditoras del país que ofrece servicios a su clientes de, entre otros, asesoría fiscal. El caso de García Valera ofrece paralelismos con el nuevo entrenador del Real Madrid, pero es mucho más grave. Este funcionario no hace nada ilegal, pero la noticia de que el Ministerio le ha pedido que monte los impuestos antes de ir a EY, adelantada por Expansión y confirmada por este diario, ha soliviantado lógicamente a sus subordinados y desatado reacción de Ciudadanos.

Para el presidente de la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado, José Luis Groba, «es mucho peor que un caso Lopetegui». «Se permite a un alto cargo ejercer una doble función: representante de la Dirección General encargada del diseño de la nueva política tributaria y al mismo tiempo socio de un despacho encargado de la optimización de la factura fiscal de sus clientes en aplicación de esa nueva política tributaria. Es el paradigma del conflicto de intereses», asegura. «Se trata de un desprecio a la función pública y al compromiso asumido cuando se ejerce la labor funcionarial. Es un ataque a su independencia y provoca un daño terrible a todos los servidores públicos», añade.

[Leer Más]

 
Patrocinadores
Colaboradores